Una de las dudas más comunes durante el embarazo es qué ropa usar cuando el cuerpo empieza a cambiar. Queremos sentirnos guapas, pero sobre todo cómodas. Y después del parto, cuando todavía estamos adaptándonos a la nueva rutina, la ropa práctica se convierte en una gran aliada.

No hace falta llenar el armario de prendas específicas ni gastar demasiado: con algunas elecciones inteligentes, puedes vestirte de forma sencilla, cómoda y bonita durante todo el proceso.

Durante el embarazo: comodidad sin renunciar al estilo

• Leggings y pantalones con cintura elástica: acompañan el crecimiento de la barriga sin apretar.

• Vestidos sueltos y frescos: ideales para no sentir presión en la zona abdominal y perfectos para cualquier estación.

• Camisetas básicas y largas: combinan con todo y son fáciles de adaptar a diferentes looks.

• Zapatos planos y cómodos: el equilibrio y la circulación cambian en el embarazo, así que prioriza modelos estables y con buen soporte.

En el posparto: prendas que hacen la vida más fácil

• Sujetadores de lactancia: prácticos para las tomas frecuentes, sin aros y con tejidos suaves.

• Camisetas o blusas con apertura frontal: ayudan a dar el pecho sin complicaciones.

• Ropa holgada de algodón: permite moverte libremente y evita irritaciones en la piel.

• Batas o chaquetas ligeras: perfectas para estar en casa, recibiendo visitas o haciendo las primeras fotos con el bebé.

Consejos prácticos para elegir bien

1. Menos es más: compra solo lo necesario. Recuerda que estas etapas pasan rápido.

2. Tejidos transpirables: el algodón y el lino son los mejores aliados para evitar molestias.

3. Colores neutros: fáciles de combinar y reutilizar después del embarazo.

4. Prendas versátiles: que sirvan tanto para estar en casa como para salir a dar un paseo con el bebé.
   
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